La Escurquilla fue
uno de los concejos del Reino de Castilla, desde el siglo XII hasta
el siglo XIX, y pertenecio a la comarca de la Tierra de Enciso, que formaba parte de la Intendencia de Soria.
Después de 1833 con la
nueva división provincial proyectada por Javier de Burgos, La Escurquilla deja de pertenecer a las tierras de Castilla la Vieja y la jurisdicción de Soria para incluirse en
la provincia de Logroño y pasar a formar parte de La Rioja.
En su día llegó a tener
luz, escuela, dos hornos comunales, médico, que subía desde Enciso, y correo. Llegó a contar en su tiempo con 20
viviendas, de las que actualmente apenas quedan una o dos en pié, ya que desde
hace cuatro décadas está abandonado.
La que fuera su iglesia
parroquial, de Santa Ana, se encuentra en el centro del pueblo. Se trata de un
edificio levantado en mampostería y sillarejo, construcción barroca de los
siglos XVII y XVIII. La planta basilical de tres tramos y cabecera cuadrada, está
cubierta con bóveda de lunetos y sujeta por arcos fajones de medio punto. En el
interior aun se conservan en parte las pinturas barrocas.
Tras la cabecera se
encuentra una pequeña sacristía. A los pies está el coro alto y sobre el muro
la espadaña, de un cuerpo con dos vanos de medio punto. Al norte está el
camposanto y el osario, en la actualidad descubierto y a la intemperie. El
ingreso se abre al sur y se encontraba bajo un pórtico que ha
desaparecido.
Su estado es de ruina, el
primer tramo de las bóvedas y la sacristía se han hundido, en su momento fue
usada como almacén. Por lo demás el estado de los muros y restos de policromía es
relativamente aceptable, aunque se presume que el deterioro avance
exponencialmente debido a la ausencia de cubierta.
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Por otra parte, tengo intención de conservar los lugares que visito en el mejor estado posible y durante el mayor tiempo posible, por ello no doy localizaciones, a parte de los sitios muy conocidos, y por ello muy vandalizados, cuya ubicación ya cito en los textos.
No saqueo, no robo, por supuesto respeto las cerraduras que están cerradas, no rompo cosas, paso por el sitio dejándolo intacto, solo hago fotografías y disfruto mucho de lo que me rodea.