LA FILMOTECA DEL CABALLO BLANCO

Guillermo Tena, farmacéutico y empresario, era propietario de una finca de 16 hectáreas cerca de Segovia en la que, desde los años 60, tuvo su sede una explotación equina destinada a la obtención de globulinas heterólogas, denominada Inmunobiológicas S.A. 

El negocio dejó progresivamente de ser rentable debido a la presión y a la competencia de las grandes industrias farmacéuticas y acabó cerrando.

Corre el año 1992, y con él la euforia de los grandes fastos, las olimpiadas de Barcelona, la Expo de Sevilla, la celebración del V Centenario del Descubrimiento-masacre de América. El dinero llegaba de Europa como los reyes magos en navidad y empresarios e inversores se frotaban las manos. De hecho, para el proyecto, a parte de inversores privados, se esperaba contar con ayudas de la Junta de Castilla y León, que nunca se materializaron.

El Panorámico aspiraba a convertirse en la primera área turístico-cultural de la zona centro de la península. Se proyectó como un parque temático que reconstruiría un típico pueblo castellano y que recrearía algunos de los principales monumentos segovianos. El complejo iba a contar con espacios comerciales, restaurantes, un hotel, dos grandes aparcamientos, un centro de interpretación de Segovia, una ermita, y un cine panorámico, que entonces era una verdadera revolución, la estrella del complejo.

Las obras comienzan en 1993, la primera fase consistía en la reforma de los establos y la construcción de una nave que iba a ser el área comercial, la ermita y el cine Panorámico. 

En junio de 1995 las obras estaban muy avanzadas. La inversión superaba los 9,6 millones de euros y todos los edificios de la primera fase avanzaban a buen ritmo. Pero en septiembre de ese mismo año una hoguera mal apagada por los operarios que trabajaban en el proyecto desató un incendio que arrasó 20 hectáreas de la finca colindante y provocó el colapso de varios muros y elementos a medio construir.

En enero del año siguiente se inundaban las instalaciones después de una espectacular nevada, ya que los terrenos del complejo se asientan sobre un arroyo, por lo que la crecida del cauce afectó seriamente a todos los edificios. Curioso es que el ayuntamiento competente diera los permisos para construir en terrenos inundables, pero eso es otra cuestión, por supuesto.

A primeros de julio de 1996 entran en funcionamiento el Panorámico Histórico y la terraza de verano. Semanas después se inauguraba la sala de cine Totalmovie, aunque solo como sala de cine convencional. Las proyecciones de gran formato se pospusieron hasta la inauguración completa del complejo.

La apertura del área comercial, prevista para el octubre siguiente, no llega a producirse debido a la desconfianza entre los posibles arrendatarios de los espacios comerciales. Durante el otoño las instalaciones siguieron abiertas, pero éstas fueron reduciendo su actividad hasta su cierre definitivo a finales de 1996, o sea que funcionó solo unos meses.

En concurso de acreedores, el complejo pasa a manos de Caja Segovia, Crespo y Blasco, Acciona y Detursa y, desde entonces varios, aunque fallidos, han sido los intentos por dar una salida a las instalaciones que han supuesto un lastre, y un problema, para sus propietarios.

Durante el verano de 1997 se llevaron a cabo dos estudios, en los que Caja Segovia y los principales acreedores determinaron que el proyecto aún era viable. Se estudió un nuevo modelo de gestión y unos meses después encontraron un comprador que, además de sacarlo adelante, utilizaría el complejo como estudio de rodaje de series de televisión, Emilio Aragón y la productora Globomedia. Aunque finalmente no hubo acuerdo y el proyecto volvió a quedarse bloqueado

Llegados a este punto, Caja Segovia optó por ejecutar la garantía hipotecaria y el 25 de mayo de 1999 sale a subasta uno de los edificios del complejo, que quedó desierta al no aparecer ningún pujador. Lo mismo ocurrió en otras dos ocasiones, en junio y julio del mismo año.

En 2010 y ante la integración de Caja Segovia en la sociedad Bankia, parece que su propiedad podría haber pasado a manos de un Fondo de Inversión Internacional, que quería utilizar algunos de los inmuebles para ubicar un hotel, pero en 2015 las instalaciones siguen abandonadas.

El complejo se encuentra en el Parque natural de la Sierra de Guadarrama, por lo que ha habido repetidas denuncias por parte de asociaciones ecologistas de la zona, que manifiestan que la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento, en cuyo término municipal se ubica, no velan por el Medio Ambiente, ya que existe alto riesgo de incendio por los residuos y vertidos, y los arroyos que pasan por el lugar tienen todo tipo de materiales, basuras, cristales, baterías, cintas de cine, papeles, destrozos y excrementos. 

En verano de 2015 parece ser que las instalaciones se utilizan como establo para ganado.

Estado actual de abandono de las instalaciones del cine, prácticamente todos los elementos metálicos han sido sustraídos.

Este sería el acceso de los visitantes a la sala, en la zona superior se encuentran almacenados elementos de atrezzo y trastos.

Estado actual de la sala de totalmovie, con una capacidad para 230 espectadores.

Parte superior de la sala. 

Esto es lo que queda del proyector, prácticamente nuevo, no llegó a tener más de 200 horas de uso.

Edificio principal, destinado a zona comercial, al que no llegamos a acceder, ya que apareció un enorme mastín y no quisimos saber con qué intenciones.

Instalaciones usadas como establo para ganado.